Desde este lunes 18 de septiembre, inició una nueva audiencia de reconocimiento de verdad por falsos positivos cometidos en el departamento de Casanare entre los años 2005 y 2008. En el espacio, 21 militares que hicieron parte de la XVI Brigada del Ejército Nacional comparecieron ante la magistratura y familiares de más de 303 víctimas asesinadas y expuestas como integrantes de guerrillas abatidos en operaciones militares.Los participantes, en la histórica jornada, fueron testigos de las declaraciones de militares que revelaron asesinatos y desapariciones de hombres, mujeres y jóvenes indefensos de la población civil para presentarlos ilegítimamente como dados de baja en combate.Uno de los militares, por ejemplo, aseguró que recibió la suma de 45 millones de pesos para encubrir al general (r) Henry Torres Escalante. Sin embargo, las revelaciones no solo fueron escandalosas, sino profundamente dolorosas.”Yo aprehendí, yo asesiné, yo torturé. Me até a una práctica sistemática de asesinatos. Yo colaboré con informaciones de Pajarito, Chámeza, Receptor y Aguazul, informaciones de área porque nunca estuve en oficina. Esas informaciones las pasaba al Batallón, Brigada y hombres bajo mi mando. Para esa época, agosto y septiembre de 2004 ya era Grupo Especial Caníbal. Allí, el suscrito, recibíamos guías civiles de la Unidad de Inteligencia, soldados campesinos, para realizar diferentes asesinatos. Los campesinos eran de cada pueblo de donde nosotros íbamos”, reconoció el cabo primero Gélber Pérez.En medio de la audiencia, las víctimas y victimarios señalaron al general (r) Henry William Torres Escalante, entonces comandante de la unidad militar, como uno de los máximos responsables de la comisión de esas desapariciones extrajudiciales presentadas por agentes del Estado.Según la JEP, los 26 imputados por crímenes de guerra y lesa humanidad hicieron parte de una red criminal de alrededor de 367 personas, todos de la Brigada XVI del Casanare.Hasta el momento, 24 de los 26 imputados han aceptado su responsabilidad en los crímenes cometidos en Casanare, mientras que los dos restantes serán investigados por la Unidad de Investigación y Acusación de la JEP.
Por: Henry Giovanni Herrera
